miércoles, 19 de agosto de 2009

¡OCTUBRE,LAS ÚLTIMAS SEMANAS DE ESTA SEGUNDA TEMPORADA!

EL PÚBLICO INSISTE Y DICE...

"MUY DIVERTIDA!!! Realmente todo el equipo se lució con esta puesta en escena.Las actuaciones son impecables. Es imposible no divertirse viendo esta obra. Felicitaciones a todos!!" Silvina... (Gracias Silvina!)

"Me pareció una obra muy entretenida. Al principio me costó engancharme con la situación, pero con el transcurso de la obra y la excelente actuación de los actores ( es muy gracioso el personaje del Dr!!!) terminé pasando un momento muy interesante y divertido. Genial todo, y una comentario aparte merece el espacio teatral Boedo XXI, que es hermoso, cálido y tienen un trato inmejorable con el público ( es increíble pero ahora eso es cada vez más difícil)." Gabriela (Gracias Gabriela!)

"Me encanto Sabor a Freud! de una frescura y encanto especial....me encanto la mistura de texto y boleros..cine..y nada menos que de la mano inigualable del maestro Feinman!Los actores magnificos....Gracias !...Sigan apostando al teatro.....sigamos apostando a la cultura.. .....Gracias y sigamos apoyando el teatro.....Valio la pena!"
María Esther (Gracias M. Esther!)

lunes, 25 de mayo de 2009

MAYO..... nueva gráfica ...


Las renovaciones para Sabor a Freud siguen llegando....

Te invitamos al Cálido espacio de Boedo XXI a disfrutar de la obra , antes de entrar a la sala podrán degustar una rica copa de vino ... Te esperamos!!!!

...




Fotografías tomadas en función...

Por Soledad González

sábado, 9 de mayo de 2009

OPINIÓN DEL PÚBLICO

El público dice sobre Sabor a Freud

02/05/2009 - Hernan
Excelente obra. Un guion maravilloso. Una representacion muy efectiva e intensa que logra mantener un nivel muy bueno. ambos actores muy buenos. Risas desde principio a fin. Muy buenos recursos de imagen.Quien no ha pensado alguna vez en psicoanalizar a su propio analista?Una obra muy recomendable para todo tipo de publico. Ideal para pasar un sabado a puro placer.mas criticas

15/04/2009 ana castellani
Dinámica, divertida, casi surrealista..Muy buenas las actuaciones de los dos actores; la dirección descubrió más juegos en el texto. Recomendable 100%...Ana de Palermo

25/09/2008 Guillermo
Una obra de altísima calidad, con una muy buena iluminación, donde muchos se verán reflejados en esos dos personajes con sus dialogos inteligentes y super divertidos y con una actuación sobresaliente, que ameritaría ampliamente estar en los teatros de la calle Corrientes. Una verdadera y grata sorpresa!!!!!. IMPERDIBLE !!!!!!

24/09/2008 Beatriz Pineda
Da gusto ir al teatro cuando se encuentra con una obra tan bien interpretada por ambos actores, una obra con ritmo, con picos de comedia y otros donde nos hacen pensar en nuestros propios traumas, felicitaciones a todos los que hicieron posible esta puesta.

12/09/2008 Pedro Lanteri
Que agradable sorpresa!Pocas veces un texto hilarante y profundo esta acompañado por actuaciones memorables.Fui dispuesto a ver una "buena" obra de teatro, sali decidido a recomendar un espectaculo como hay pocos en la cartelera porteña.

25/08/2008 Gala
Recomiendo esta obra, puesta multimediale y actores con talento. Descubri un lindisimo teatro en el barrio de Boedo, no dejen de ir. Felicito a la gente de Boedo XXI.

domingo, 3 de mayo de 2009

miércoles, 15 de abril de 2009

Dijo el diario crítica..15/4

Boedo es un reconocido
centro tanguero y turístico,
pero a nivel teatral también
tiene lo suyo, aunque con
menos polvareda.
“…En Boedo
XXI (Boedo 853, al lado del
histórico café Margot), se
presenta silenciosamente
Sabor a Freud, de José
Pablo Feinmann, con
dirección de Jorge Vigetti
y las actuaciones de Julio
Luparello y Susana N.
Fernández. La obra había
sido estrenada en abril de
2002 por Luisa Kuliok y el
recordado Ulises Dumont,
dirigidos por María Julia
Bertotto, pero la crisis le
pasó por arriba. Esta nueva
oportunidad valió la pena:
ya van por su segunda
temporada, los sábados a las
21hs., a 30 pesos.
“Sabor a Freud”. De José Pablo Feinmann.

http://criticadigital.com/tapaedicion/diarioentero406para_web.pdf

domingo, 5 de abril de 2009

Sabado 4 de ABRIL....2009




Arturo Bonín, unido por afecto a BOEDO XXI y amigo personal de José Pablo Feinmann, disfrutó de la función junto a su esposa,la actriz Susana Cart.

Destacó la puesta y expresó su satisfacción por el momento vivido.

Gracias por acompañarnos desde el inicio de este proyecto.

lunes, 30 de marzo de 2009

Fotos de la obra...SABADOS 21 hs.


Crítica 28-03-2009
La pregunta que plantea la función es simplemente la pregunta sobre el objeto de transitar por el mundo hoy. Y es que la constante lucha entre la razón y la pasión queda resuelta en esa línea: "...el corazón tiene razones que la razón no entiende...". Como la vida, termina en la muerte, en la muerte de la terapia que el sicoanálisis que, triunfante, cede, comparte y se aleja junto a la pasión a ritmo de bolero.Los personajes son espléndidos y la propuesta es muy divertida e interesante. Entre carcajadas es posible lograr cuestionarse acerca del dolor y el sufrimiento, de la infancia y el marido, del interminable juego del presente, el pasado y el futuro; donde el escenario de un consultorio sicoanalítico inunda el salón y nos envuelve en la lucha de personalidades que, aunque divididas, no son sino un sujeto rico, múltiple, lleno, pero a la vez indeterminado, ajeno a sí mismo...Definitivamente espectacular. Además de su calidad excepcional, es una experiencia supremamente cómoda y deliciosa.
No se la puede perder.

Enrique Ríos













jueves, 26 de marzo de 2009

BOLEROS Y PSICOANÁLISIS, una combinación que sorprende

“Sabor a Freud” es una comedia inteligente sobre dos personajes que deciden bucear por los recovecos de sus mentes al ritmo de boleros. (RED TEATRAL)

Sabor a Freud
El Dr. Ernesto Kovacs (Julio Luparello) no pierde un instante para quejarse de la paciente que le ha tocado en suerte. Así, nos presenta a Lucía Espinosa (Susana N. Fernández) y también a Dolores Durán, dos mujeres en una, o mejor dicho… una en dos. Dolores, una sensual cantante de boleros, se adueña por momentos de Lucía para realizar los sueños que ella no se permite. Kovacs intenta ayudarla e ingresa al mundo mágico de su paciente, poblado de fantasmas que se cuelan por el celuloide de varios clásicos de Hollywood. Pero detrás de todo esto, las interrupciones a ese espacio fantástico abren las puertas a otros submundos más íntimos y privados. Cada espectador tendrá su lectura de “Sabor a Freud”. Por un lado, podría decirse que se manifiestan en el analista todos los fantasmas de Lucía, un simple objeto para que esto se haga posible. Por otro lado, el profesional encontraría a través de Lucía a su otro yo, casualmente otro cantante de boleros, llamado Javier Vargas.
El bolero es sin dudas el punto de inflexión entre los personajes y el psicoanálisis. Un ritmo que describe al amor como ninguno, ese “te vas porque yo digo que te vayas… pero no me dejes porque me importas tú… y nadie más que tú”. ¿No sería esa suerte de “amor-odio” el eterno conflicto al cual se enfrenta el ser humano?
"Sabor a Freud", escrita por José Pablo Feinmann y dirigida por Jorge Vigetti se presenta en el Espacio de Teatro Boedo XXI.
Una muy buena salida para los sábados por la noche, con un plus que merece ser mencionado: el clima acogedor que se genera antes de ingresar a la sala aporta bastante a las expectativas del público. FACUNDO ESPÓSITO

miércoles, 25 de marzo de 2009

Ariana Perez Artaso de REVISTA SIAMESA dice...

A los argentinos, si me permiten la generalización, el psicoanálisis nos gusta. Nos psicoanalizamos, leemos a Freud, intentamos con Lacan, hacemos catarsis con amigos y verbalizamos a más no poder intentando ahuyentar a nuestros fieles fantasmas.
Será por eso que entrar a la pequeña sala del Boedo XXI y encontrarnos con un diván y un cuadrito de Freud en la pared nos habla de algo conocido y nos predispone a volvernos espectadores silenciosos, casi espías -porque vouyeres suena un poco vergonzoso- de algo que intuimos.
Julio Luparello espera sentado del otro lado del escenario, es decir, del lado que nos toca a nosotros, los mirones. Al apagarse todas las luces, Luparello se transforma en el doctor Ernesto Kovacs, quien nos advierte que ella está por llegar y que viene en busca de algo. Lucía Espinosa llega al consultorio puntual a las 12 del medio día –horario especial otorgado por Kovacs, dada la desesperación que creyó percibir en la voz telefónica de la mujer-.
“Cuéntame tu vida” es el abracadabra que da inicio al relato. Con música sacada de viejas glorias cinematográficas, los personajes nos enseñan que todo sujeto está dividido en dos, y que esto no siempre quiere decir esquizofrenia.Y es que, admitámoslo, detrás de nuestras fachadas, racionales y culturalmente aceptadas fachadas, soñamos o jugamos a algo más. Hay quienes seducen al espejo, están los que cantan en la ducha o escriben cuentos que nunca serán leídos. Esta fachada es la que a pesar de todo intento de reconstrucción, comienza a desmoronarse en Lucía Espinosa. Al mejor estilo del Increíble Hulk, las ropas de esta correcta mujer son arrancadas por Dolores Durán, fémina sensual que canta boleros al ritmo de sus imparables caderas y magnético pecho lleno de brillo. Cuando Dolores Durán se apodera de Lucía Espinosa el aire se vuelve más caliente. Con el trópico en la sangre y la sensualidad en la piel, Dolores le explica, le canta, le susurra al racional Kovacs, que la vida puede ser un bolero y que allí sólo se puede amar o matar, y que lo del medio –esto es, el matrimonio vuelto rutina con sábado de cine y polvo ocasional- no importa.
Desbordado ante tanta mujer, la racionalidad del doctor Kovacs termina de romperse con el llamado de su madre. Esto da el pie para el intercambio de roles; Lucía juega a hacer las preguntas y el doctor responde dejando ver sus heridas abiertas; con un Edipo no resuelto y la tristeza en el alma, el hombre revela que no sabe bailar. Pero por suerte, lo que no se puede bailar, bien se puede cantar. La otra mitad de Kovascs se llama Javier Vargas y es, nada más y nada menos, que un cantor de boleros. Otra fachada que se nos cae.Y así, entre madres desamoradas y maridos aburridos, entre la ciencia y la pasión, el amor es posible -arrasando con lo ético y riéndose de lo impuesto- permitiéndoles a los personajes ser, aunque sea por un rato, Ingrid Bergman y Humprhrey Bogart perdidos en el África porteña.
Sabor a Freud, en una crítica a la modernidad, nos recuerda que todavía se puede bailar de a dos, que los cuerpos pueden tocarse y que a pesar de ello, estamos a salvo; que las canciones pueden ser cantadas al oído y que es posible enamorarse, aunque el mundo afuera se derrumbe. Nos hace pensar que las teorías no son bailables, pero que a lo mejor sí nos hablan de amor. Y si Pascal fue el primero en escribir boleros y Freud –como explica Dolores- fue un romántico, sólo nos queda creernos eso de que el corazón tiene razones que la razón no entiende y que entre tanto tango y sapiencia está bien de vez en cuando, dejarse llevar por las pasiones y bailar un buen bolero.
Gracias por tu presencia y tus palabras!!!

sábado, 14 de marzo de 2009

SEGUNDA TEMPORADA!!!!

La crítica dijo:
"Original puesta en intertexto permanente con el discurso cinematográfico" Inge Voss. Los restos del naufragio
" Julio Luparello entrega un sanguíneo trabajo en el que ningún momento baja su intensidad; Susana Fernandez va logrando el "delirio" de su personaje a medida que avanza la obra" Gabriel Peralta www.criticateatral.com.ar
" Cumple con su cometido de entretener " Daniel Gaguine NOTICIAS URBANAS
REESTRENO
SÁBADO 21 DE MARZO 21 HS
SABOR A FREUD
de José Pablo Feinmann

Una historia de amor ¡¡¡de película!!!
¿Boleros vs. psicoanálisis?

Susana Fernández- Julio Luparello
Dirección Jorge Vigetti

Entrada gral $30
Estudiantes y jubilados $20

BOEDO 853
Reservas 4957-1400

Ud. puede reservar su entrada telefónicamente de lunes a domingo. Si deja su nombre y número de teléfono en el contestador le devolveremos el llamado para confirmar su reserva.